Un poco de todo.

Las siguientes quinientas y tantas palabras las escribo pensando en algunos temas y creo que lo mejor que puedo hacer es tratar de cambiar un poco el orden en que van a salir; quizás de esa forma puedo darle un poco de darle un poco de seriedad a los comentarios que se lo merecen. Comienzo con el mundillo friki nacional, no sé si la situación regional sea un asunto que se repita en las grandes ciudades en la cuna de libertadores. Considero que la calma es buena, así de simple, creo que es mejor en comparación con lo que había antes.

Sigo dando vueltas al asunto de la lista de las posibles festividades que puedan estar de regreso para este año, creo que le tendré que seguir dando largas a ese tema. Tengo mis razones para hacerlo, creo que debo darle una mirada nuevamente a esos nombres que pueden estar en la mencionada lista, aunque creo que las probabilidades que ese hecho no vaya a darse, ya que no estamos en el mejor momento para el mundillo friki; el mundo real y la economía del país es un asunto que sigue dando golpes.

Yo recuerdo que en su momento ciertos responsables de blogs daban sus comentarios sobre el exceso de festividades en la ciudad jardín de Venezuela, cuando la densidad de la población de esta distaba mucho de la capital y sin embargo siempre fue escenario de saraos y siendo un fenómeno del que se escribió mucho en su momento. Hoy, el asunto es diferente y mucha de esa gente escriben de otros tópicos relacionados con el mundillo y quedan mejor dedicarle letras a las series del momento por mucho que digan que no.

Paso al tema serio, en la cuna de libertadores el asunto del circo electoral no es otra cosa que una simulación y si me apuran la gran candidata se va a quedar como un error de programación menor, uno que puede ser necesario para decir que por estos rumbos hay democracia y demás tonterías habituales a las que no tiene acostumbrados la tiranía. Aunque me sorprende el hecho que han estado rompiendo ciertas costumbres que inició la mortadela galáctica en esos temas.

Entregar bonos, sacar los payasos del acontecer cultural y otras jugadas bajas estaban a la orden del día cuando la chequera petrolera estaba en su mejor momento; así que creo que lo mejor que se puede hacer hoy es hacer caso omiso a los cantos de sirena que se la pasan gritando que hay que participar y que no nos queda de otra que usar el voto en contra de un grupo de criminales que tomaron el poder por las malas, que no van a soltarlo de ninguna manera.

La pregunta de manual que sacan unos es ¿Y qué propones? Un primer paso sería dejar de participar en la simulación electoral, de hecho, creo que es una buena idea, pero de eso ya he dicho una que otra cosa al respecto. Y ¿Qué hay que decir acerca de los medios de comunicación en este tema? Bastante y es que necesitan seguir siendo marionetas de una tiranía.

De elecciones, votos y otros demonios.

Consideren el presente mar de letras como un primer acercamiento al asunto relacionado con un tema, que no es mío, pero creo que es un asunto que sería bueno discutir. Y es el hecho del que escribí hace algún tiempo, el derecho al voto en la cuna de libertadores, ya que estamos en “año electoral” y es un asunto que no se limita a la cuna de libertadores ya que hay varios países a nivel mundial que van a cambiar o ratificar al empleado público con el mejor sueldo en sus respectivas naciones. El asuntito que alguien colocó sobre la mesa es, me parece a mí, un cambio en el marco legal de Venezuela es un asunto con colocar una edad máxima para ejercer el derecho al voto.

Mis tías se sumaron a la simulación electoral relacionada con el Esequibo ya que se creyeron todo el asunto de las pensiones y bonos, pero lo cierto es que la gente de la tercera edad no comprende plenamente la situación (aunque no se limita a la gente de la mencionada edad) y es comprensible, es que la tiranía no va a salir con votos. Puedo comprender el hecho que sea un asunto que no les agrade mucho y que le hagan la cruz cual vampiro, pero deben comprender que, si seguimos con la ruta electoral, el resultado va a ser el mismo.

Al menos personalmente, no me gusta la idea de colocar un tope en la edad para el ejercicio del voto, creo que lo mejor es vender la idea a lo que queda de juventud en el país, así como a la gente que ya anda más allá de los veinticinco, es el hecho que todo lo que sucede en la cuna de libertadores a nivel electoral no es otra cosa que un circo, una simulación. Una que empieza desde el momento en que la tiranía designa a unos de sus amigos para la oficina dedicada al conteo de votos.

Quizás por eso, todo el asunto de la doma y conquista de ciertos sectores de la juventud nacional ya es un asunto al que se le pasó la página. Yo nunca entendí las razones por las cuales hacían tanto empeño en el voto joven, reitero el asunto del amigo metido en la oficina electoral, quizás tenía que ver con el asunto de venderse como algo menos deficiente pero sus acciones siempre dirán lo contrario. Los festivales funcionaron, mientras la renta petrolera estaba en su esplendor, pero lo cierto es que ¿Qué van a hacer ahora?  

La tiranía puede cambiar el candidato del equipo rojo, mientras el equipo alacrán seguirá peleando con sus homólogos y tendremos que ver como la voz de la señora Machado va a quedar apartada nuevamente. Entonces, no importa si buscan el voto joven o le ponen una edad máxima para ejercer el derecho al voto, dentro de las fronteras de Venezuela lo que hay que hacer (de nuevo, es una consideración personal) es no participar. Hasta que todo vuelva a tener cierto nivel de normalidad, creo que se podrá tener otra vez unas elecciones normales.