¡El rey ha regresado y repite la jugada!

Las personas que me conocen saben que me gusta la banda de Dave Mustaine (Megadeth) y creo que una canción de la mencionada sobre un monarca muerto dice mucho del tono del presente mar de palabras. De hecho, no voy a negar el hecho que lo que voy a narrar aquí me ha tomado por sorpresa y es que (sin tanto preámbulo) las redes sociales de la que una vez fue la festividad friki que tomó al mundillo friki como su feudo personal a usado a su heraldo plenamente conocido para anunciar, como cosa rara, que va a regresar.

De hecho, creo que ya habían intentado esa jugada y la recepción que le dieron no fue precisamente buena. Y tampoco no es una jugada propia del monarca, ya que su rival/alternativa conocida como el magno evento del mundillo friki nacional lo intentó en su momento; pero comparten muchos aspectos el anuncio en cuestión. Se hicieron   los anuncios con bombo y platillo siendo una práctica recurrente en ambos casos, en un entorno en donde los otros aspirantes al trono no estaban plenamente en buena forma y la misma situación económica había diezmado esa lista.

¡Larga vida al Rey! Podría exclamar a todo pulmón, pero considero que si me engañan una vez es tu culpa, pero a estas alturas del campeonato tengo que decir que tratar de engañarme una segunda vez les va a costar; considerando todo el historial acumulado de vender “esta es la última entrega o están saboteando a su majestad” y similares, pues creo que tengo mejores cosas que atender. Pero dedicarles unas cuantas líneas me sale gratis.

La recepción del regreso del magno evento pasó sin pena ni gloria, ya sabemos lo que se opina del malo conocido, pero con la insuperable la cosa cambia. Si para 2013 no dejaba de usar mi bilis para escribir en esta sección de mi blog, leer la noticia de su regreso me causa risa hoy. Parece que, nuevamente, la banda a la que le hice mención del principio de este intento de artículo tiene razón, todo indica que una nueva guerra santa por el trono se podría avecinar. Y sabemos muy bien que eso le ayuda al heraldo de la insuperable a levantar las estadísticas de su blog, a pesar del hecho que los sospechosos habituales responsables de eso ya no están.

¿Será que no se les ocurre nada nuevo? Digo, la idea de tomar una estrategia ajena que fracasó y hacerla tuya para ver si funciona no es mala idea, la industria juguetera ha estado girando sobre eso por un buen tiempo; pero estamos hablando de un servicio y en ocasiones las impresiones que dejan los servicios duran por un buen tiempo. La paz ya no vende tan bien como antes, así que el viejo monarca simuló su muerte, quien sabe si aún estarán los cortesanos de siempre para apoyar esto. Digo, algunos monarcas que deciden regresar a las andanzas no le van bien, al Napoleón Bonaparte luego de varios exilios le cayó un Waterloo.

Lo diré de buenas a primera, voy a sacarle crías a este tuqueque así que prepárense para unos cuantos artículos que van a girar sobre este tema.

Las siguientes quinientas palabras.

Originalmente, tenía ganas de hacer una especie de secuela espiritual de uno de mis aglomerados de palabras que le dio un cierto impulso de fama a mi humilde rincón y considerando el hecho que en donde aparecen las presentes palabras, no sé si esto que estoy haciendo se le pueda considerar como una especie de antesala a ese posible intento de artículo; pero sin más, considero que es necesario darle comienzo a esto.

Y lo hago comentando el hecho que, a riesgo de equivocarme, cuando el presente intento de artículo vaya a ser publicado seguramente un pequeño evento friki ya habrá pasado o quizás estará faltando pocos días para que se lleve a cabo. Independientemente del hecho que se hable de un resurgir de las festividades frikis, no hay mucho que agregar al respecto. No lo digo por lo siguiente, el hecho que el evento se vaya a llevar a cabo en las afueras de la ciudad de Maracay es por el hecho que seguramente buena parte de las viejas figuras del mundillo vaya al mencionado.

Y debo hacer la pregunta ¿en cuánto le saldrá la asistencia a cada uno de los frikis que vaya al mencionado evento?  Ya que hasta para lo que queda de la comunidad de MTG, una nueva tienda es apenas un pequeño oasis en el desierto que durará poco, siendo una tendencia natural de la mencionada comunidad y quizás habrá que hacer una pregunta a los frikis que, en su momento, se les hacía a los jugadores de MTG ¿Cuántas tiendas quebradas van a necesitar para enmendar camino?

Me arriesgo a decir que puede quedar una sola tienda en la ciudad jardín de Venezuela, así como el hecho que esa misma tienda va a estar en el evento que hice referencia palabras atrás, aunque por mucho que se diga que el mundillo anda dando pasos de vida, me parecen que siguen siendo un éxito aislado; por ende, no se ha cambiado mucho desde esos días al presente. Quizás ahora unos pueden hacer de las suyas a sus anchas ya que no hay blogueros buscando ser el pescador en río revuelto.

Aunque los últimos a los que les hago mención deberían pensar bien sus acciones, ya que la situación actual tampoco es muy buena para ellos, no hay muchos organizadores de saraos a los que les pueden vender sus servicios como publicistas indirectos, así como servirles como perros de cacería para cuando la sangre llegue al río. Pueden hacer todos los anuncios que quieran, ya mucho de la relevancia que tenían hace rato que se perdió; unido al hecho que, como dije en muchas ocasiones, el peor escenario estaba asomando su cabeza y nadie le prestó atención al asunto.

Aunque le estoy cargando mucho a la generación friki con la que me tocó convivir, la situación económica del país tiene vela en este singular funeral. Ver lo que una vez fue una tienda friki, vilipendiada, pero tienda, al fin y al cabo, ahora convertida en uno de los muchos locales vacíos que se pueden ver en el centro de Maracay es una muestra de eso; de la misma forma en que los viejos sitios en donde se reunían los grupos han pasado a otra cosa; de hecho, unos siendo una sombra de lo que una vez fue.

Escarcha y oro 1/4

La alarma de su teléfono  había hecho su trabajo, con pereza Érica se sacudía las sábanas y decidió darle uso al humilde televisor que tenía. Un comentarista anunciaba a todo pulmón la llegada de dos magos a la ciudad, justamente ese dúo que tanto le gustaba ver a Érica, Escarcha y Oro. Pero allí estaba ella, animada por el anuncio, pero dando tumbos por su cuarto y posteriormente por el departamento de su tía.

—¿Quieres comer “tigrillo”? Yo también, pero ahora mismo me entusiasma más ir a la presentación de esos dos magos.—le comentó al enorme gato de su tía, el único residente que la acompañaba cuando se despertaba temprano o se quedaba hasta tarde trabajando.

Tomó los audífonos de su teléfono, encendió la radio del mismo buscando alguien más que estuviera hablando de la llegada de aquel par de magos, quienes se encontraban haciendo su segunda gira por el país.

—¿Cuántas veces te comenté que me gustaría hacerles unos trajes a esos dos, “Tigrillo”? Hasta yo perdí la cuenta de eso, las academias de modelaje pagan bien, pero nuevamente me siento estancada.

La maestra de Érica le envió un mensaje de texto, le explicaba que le había llegado un singular cliente y pensó que ella era la indicada para atenderlo. Y si bien su maestra era muy capaz de hacerlo, seguramente estaba ocupada con esto de mantener la escuela al día.

—Voy a tomar el asunto, ya que ¿Qué es lo peor que puede suceder? Dudo mucho que sea un mal pago, ya que si estamos en esos temas, quiero terminar de pagar la tarjeta de crédito y quiero unos nuevos lápices para diseñar así como nuevas libretas.

Ella tenía ya dos años en aquella ciudad, había dejado colgado su título universitario luego de unos cuantos años ejerciendo aquella carrera y con la cual, ya no estaba tan plenamente a gusto, aunque aún mantenía el contacto con sus amigos de aquellos días.

 El mundo de la moda le caló muy hondo y simplemente no quería dejarlo de lado; a pesar del hecho que aquel cambio en su vida como profesional lo había hecho años después de graduarse y haber acumulado varias experiencias laborales, usando aquel dinero para pagarse su nueva profesión.

—Y ya no me queda mucho dinero de aquel trabajo que me llegó con el asunto ese del equipo de beisbol local. Puede que aguante con lo que queda unas cuantas semanas más, cuando mucho.  Y en momentos como estos, no sabes cuánto envidio tu estilo de vida “Tigrillo”, ya que lo peor que te puede suceder es que te quedes sin arena para hacer de tus necesidades.

 

See Your Space Cowboy

Casa número ochenta y seis 11

Aquel restaurante de comida rápida tenía varias paredes adornadas con las firmas de los clientes, pero una en concreto tenía un pequeño anuncio de neón donde se encontraban no solo las firmas, sino también las fotos de aquellos a quienes el dueño del lugar consideraba como sus mejores clientes.

Aunque llegar a esa condición no era algo tan complicado, bastante con pagar bien y no abusar tanto de las servilletas, robar cubiertos y listo ya estaba en esa lista. Su dueño era alguien que no le temblaba la mano en escribir el nombre de una persona en su lista negra, así como el hecho que tenía un cartel que decía con una fuente bien grande “Se reserva el derecho de admisión”

Pero aquella noche la suerte parecía estar haciendo muchas bromas, ya que allí se encontraban Josh, su esposa, Wilson y ni más ni menos que el contratista llamado Russel, ese que se había ofrecido en reparar la filtración en la casa donde todos esos muchachos vivían.

—Creo que he visto en otra parte a ese muchacho—comentó Josh—, estoy seguro. Y ¿Qué me dices de ti amor? Por cierto, nuestra querida niña ya está dormida, la niñera anda cenando, de hecho me sorprende que tenga como pagarse comida a domicilio.

—Oye, ahora que lo mencionas, creo que debo estar de acuerdo contigo, amor—agregó Melisa— ¡Por el protector bucal del gran Mohamed Ali! Estoy más que segura que podría reconocer ese sombrero donde sea. Y, tu que te estabas preocupando por el asunto que se demoraba demasiado en atender el teléfono de casa.

— ¿De qué me perdí Wilson?—le preguntó Russel al cronista deportivo. El contratista cristiano regresaba del baño y tomaba asiento en la mesa. —; aunque debes admitir que, a pesar de todo, no son tan malos padres. De hecho, el cambio que han hecho es algo digno de escribir.

—Esos dos hablando que reconocieron un rostro y un sombrero vaquero que acaba de entrar al restaurante. Creo que hice mal en dejarlos tomar y pagarles el taxi de regreso a su casa. –fue la respuesta de Wilson, entre apenado y tratando de hacer un chiste. Bueno, si a estos ñoños que suben videos en esa red social de videos los han convertido en escritores, creo que esos dos tienen algo de oportunidad. De hecho, yo compraría ese libro.

—Creo que estas de suerte, Wilson. He visto a ese par ponerse así de intensos por cosas más extrañas; de hecho, debes sentirte contento por el hecho que están discutiendo por un sombrero vaquero y no por una serie animada repleta de ponis.— comentó nuevamente el contratista, para luego beber un poco de su té con limón.

— ¡Eso fue una sola vez!—exclamó Melisa—, además, es la serie animada que compartimos con nuestra hija. De hecho, es la única que se ganó nuestra aprobación. Además, es una serie animada a la que le guardo mucho cariño, ya que la veía en secreto conjuntamente con mi madre.

Lucrecia estuvo mirando los rostros de los otros clientes, tratando de llevar por dentro aquella procesión que sentía. De hecho, a tiempo, concluyó que no había razones por las cuales sentirse así de extraña ante ese comentario que desató la llegada a ese local de comida rápida.

Quizás, meditaría sobre el tema al llegar a su casa. En la compañía de uno de sus libros, su querido I—POD y la almohada. Ahora debía dejar de pensar tanto y disfrutar no solo la victoria que tenía y la comida que estaba por comer. Y más considerando que Bianca iba a ser quien iba a pagar, cuando era un fenómeno raro que sucediese.

—Y dinos Lucrecia ¿Vas a ver tu sola la serie o la vas a compartir?— le preguntó Richard—, ya que dijiste que nos ibas a mostrar algunas películas de terror italianas y nunca pasó.

—Te recuerdo que mi amiga en el cine club del campus renunció hace tiempo. De hecho creo que me tocará asumir esa responsabilidad— fue la respuesta de Lucrecia. —, he estado meditando sobre ese tema, la verdad. Y no me parece tan mal tercio meterme en eso.

—Ya está cerca octubre, así que te toca cumplir con tu palabra—agregó la estudiante de medicina. —, además ¿Recuerdas el Halloween del año pasado? Lo más entretenido fue ver la casa embrujada que montaron los vecinos y el cine improvisado. Seguramente, ya la dirección de cultura de la universidad ya debe estar un poco cansados de tus locuras.

—De hecho, ver la clásica película “El Exorcista” en ese cine improvisado fue una experiencia digna de ser inmortalizada—agregó Richard—, más si agregamos el hecho que, esa película con todos los años encima que tiene, sigue dando ese miedo.

—De hecho, si me permiten comentar algo, esa película es un clásico del terror. Aunque, en lo personal, prefiero “El Resplandor” así como el hecho que podríamos hacer algo para esa fecha. De hecho, recuerdo que mi abuela me había comentado mucho de esas fiestas de Halloween en la urbanización. Me gustaría participar en una, claro si tengo ese día libre.

Las palabras de Arthur sorprendieron al resto de sus compañeros, aunque ya tendrían tiempo para hablar de ese asunto, ya que la amable mesonera estaba en frente de la mesa que estaba esperando para entregarles la carta.

Si había algo en que muchos concordaban era que el servicio de aquel restaurante de comida rápida estaba a la misma altura de otros locales. De hecho era una constante en las miles de páginas y aplicaciones que se dedicaban a escribir sobre los locales de comida y comida rápida en esa región de Los Ángeles.

Minutos en silencio, extrañamente aquellos muchachos estaban revisando sus teléfonos. Pero, había algo adicional en esa situación, ya que tanto Lucrecia como Arthur, no estaban escondidos detrás de las pantallas de su teléfono pero ¿De qué querían hablar aquellos dos? Y más, si iban a hablar ¿Cómo harían para no molestar a sus compañeros de mesa?

— ¿Ya saben que van a ordenar?— preguntó la mesonera con una sonrisa en la cara, aunque ya estaba dando señales de que estaba agotada. Segundos después de haber anotado el pedido de cada uno, se marchó.

—Vamos a ver si todo lo que dicen de este local es cierto— dijo Bianca, iniciando otra vez la conversación. —, aunque debe ser bueno, ya que creo que no estamos solos aquí. Más si consideramos el hecho que no estamos solo aquí.

—Más sí que los mismos que estaban en el concurso en el cual participamos, aquí se encuentran comiendo— agregó el estudiante de abogado—; aunque creo que nuestra querida amiga estudiante de periodismo debe saber mucho sobre este local y su relación con ese actor devenido en locutor de radio. De hecho, no lo hizo tan mal como moderador de ese concurso.

—Oye, ahora que lo mencionas citadino, es cierto— matizó Arthur—, creo que no era la primera vez que estaba metido en algo así, ya que supo cómo ocultar su nerviosismo. Aunque, es raro eso, considerando que tiene un historial de ser un actor de dudosa reputación.

—Les recuerdo que estuvo nominado a un Oscar—apuntó Lucrecia—, por una película que no es tan pesada como las que siempre están metidas en esa premiación. Creo que la he visto como dos veces nada más. Aunque lo interesante del asunto es que el director y guionista de la misma se retiraron del negocio el año pasado.

—Y ¿Qué hacen ahora?— preguntó Bianca.

—De seguro se van a reír—agregó Lucrecia, quien estaba por comenzar a dar su respuesta—, ahora dan clases en la Academia de Cine de la ciudad de New York, en sus respectivas áreas; de hecho he estado insistiendo que vengan un día para que sean parte del jurado de nuestro concurso de cortometrajes.

A los pocos minutos, aquella conversación se calmó con la llegada de la comida y la bebida, Arthur se quitó el sombrero y dio una pequeña plegaria, mientras sus compañeros estaban comenzando a comer y moviendo los contenedores de las salsas de un lado a otro.

Terminó la plegaria, vio a su alrededor y comenzó a comer

 

See Your Space Cowboy

Escribiendo sobre el regreso que no se dio.

Por mucho que, a la final, se apeló por dar un cambio de nombre la condición de secuela espiritual no se le quita a la convención evolución; esa que se presentó con polémicas, dimes y diretes al por mayor y que prometió para 2017 ser uno de los tantos candidatos al trono en lo que se refiere a las mal llamadas convenciones en la cuna de libertadores. Pero si bien es cierto que, para cuando estas líneas vean publicación, todo lo referente al regreso ese no se llevó a cabo.

Quizás un intento de artículo de alrededor de mil palabras sea demasiado, de hecho así lo pienso, pero igual si no me siento a escribir lo que tengo atorado va a ser peor y dudo mucho que en los limitados párrafos que escribo en otros apartados vaya a ser suficiente para calmarme un poco; a la final, fue más ruido que otra cosa todo ese asunto ¿No es así? Y tal como andan las cosas en la cuna de libertadores, no sé si vayamos a ver el regreso y quiero creer que no se necesitan que regresen, ya tenemos suficiente mal olor con los políticos y con la inquisición que tiene este mundillo casi desde su aparición.

Aunque es uno de esos asuntos que unos no quieren hablar, pero la realidad les dice que puede no darse, por ende, esas prebendas de las que siempre disfrutaron,  ya no son las de antes y con esa verbena simplemente estaban en tela de juicio, más que todo por asuntos de bolsillo, un tema que no solo se le puede achacar a la asistencia, sino también a los organizadores. Simplemente, ya no es rentable estar de un lado o de otro de esa línea del mundillo que divide a los asistentes de los organizadores.

Si bien es cierto que tampoco es que haya mucho que comentar con respecto a los pormenores que se llevaron a cabo durante el anuncio de ese regreso, los chismes de pasillo tampoco parecían muy interesantes. Quizás lo que sorprendería sería, se me ocurre, algo como que hayan anunciado primeramente el anuncio (previo al cambio de nombre) en un evento de la competencia, eso hubiera sido una de esas acciones a que uno simplemente no le ve ni pies ni cabeza. Una cosa es que cada año entre nuevas personas al mundillo, pero otra muy diferente es el número de entradas vendidas, elementos que si bien están en el mismo análisis, son diferentes y que (en el caso que nos atañe aquí) fueron los viejos conocedores del mundillo que ya tenían una idea de por dónde estaban sonando las campanas.

Honestamente, el año 2017 no fue el año friki (al menos  dentro de las fronteras venezolanas) ya que hay un empeño en ocultar al señor cronograma de eventos, de hecho las predicciones de unos que decían que para el mencionado año iba a estar repleto, a duras penas tuvo algún abultamiento y más si consideramos que hasta los eventos de dudosa calidad parece que les afectó todo el asunto del dinero y la falta de nuevas excusas también se las llevó la crisis y eso es decir bastante, considerando que si había un gremio conocido por sus excusas sin importar quienes fuesen, aunque también se hicieron de un renombre (algunos) por los epítetos que se gastaban para sus propios trabajos.

Tampoco se dio el regreso, en días pasado ese asunto hubiera dado de que hablar y quien sabe por cuánto tiempo.  A unos los hubiesen obligado a mantener el correspondiente “silencio administrativo” hasta que la situación fuese la pertinente para dar a conocer su particular visión del asunto; quizás por el mero hecho que unos cuantos que estuvieron entre los responsables de la convención que se superaba a sí misma, estaban metidos de cabeza en la convención evolución, así como todo lo referente a dimes y diretes relacionados con la polémica cuando uno de esos viejos responsables del alud, pasó a sacar su propio intento de convención, a pesar de que solo duró una sola entrega y que dio mucho de qué hablar.

Los últimos mencionados sacaron un comunicado, hace ya tiempo, alegando que eventualmente la convención evolución la tendremos pronto y como cosa rara en la capital de Venezuela; una de las metrópolis de Venezuela que si bien es donde se encuentra la mayor parte de la población nacional, de un tiempo para acá no tiene un número denso de convenciones, cuando eran las ciudades del centro del país que tenían ese “honor”.  Quizás los intentos de convención que se hacen en esos puntos pudieran tener alguna que otra mención entre los frikis de la capital, pero el tiempo ha demostrado que esa línea que separaba las convenciones capitalinas y regionales simplemente pasó a mejor vida.

Para mí, había gato encerrado en ese asunto del regreso y que la mejor opción siempre fue apelar por el cambio de nombre y vender la verbena como una secuela espiritual del alud, una medida un tanto más honesta pero simplemente no iba a tener  tanto impacto dentro del mundillo friki criollo, tan acostumbrado a la polémica y ¿Qué mejor que una relacionada con la que fue la convención que marcó un antes y un después con contundencia y eclipsó al magno evento friki nacional?  Ese del que escribí para bastante en días pasados y que, por mucho que me disguste, va a seguir generando un tímido número de vistas a mi rincón en la red de redes. Y quizás debería dejar todo hasta aquí, ciertamente, ya que estoy reiterando lo que ya se sabía además ¿Qué me queda por decir?

Vamos a ver que tiene que ofrecer el próximo año para el mundillo ya mencionado, en vista que no pinta nada bien para el mundo real y que (espero) seguramente tendremos una inquisición que poco o nada se va a terminar de enterar sobre ese tema relacionado de la pérdida de relevancia y que, les guste o no, vamos a ver si se les deja ver en las convenciones (mejor dicho intentos de convenciones) y que nadie les ha querido decir que están ya oliendo mal.