Su extraño Valentín, muñeca pelirroja episodio 2

Parte 1

Los hábitos no los había perdido, seguían allí, así que lentamente estuve tratando de armar el perfil de Alfonso. No debía fiarme de lo que me dieron los uniformados, así como que, en más de una ocasión, la información de Dany que guardaba con celo estaba llena de elementos propios de él; a pesar de todo, no dejaba de ser uno de los muchos ciudadanos decepcionados del gobierno y que la vida del crimen le parecía mejor y más si alguien podía llenarle la cabeza de pájaros, mucho mejor.

Me aterró la idea de pensar que, en una situación similar, yo sería el que tuviera esos pájaros. Debía confirmar con mis propios ojos si el nuevo querer de Roxana no era otro que la dejaría encerrada en su cuarto, escuchando baladas del siglo veintiuno sobre los corazones rotos y escribiendo en su blog textos sobre la lluvia.

—¿Qué tal el primer día de trabajo, campeón? —me preguntó mi abuela al verme llegar.

—Nada mal, a pesar de que me dio un golpe en las finanzas. —fue mi respuesta.

—Yo temía que este día iba a llegar, Nick. Solo Dios sabe cuántas veces lo hablamos tu abuelo y yo; más ahora que las cosas están tan revueltas y no sabemos si a tu hermano menor lo puedan mandar de un momento a otra al frente.

Yo me salvé de la recluta, gracias a mi línea de trabajo, mi hermano menor no mucho hizo en ese tema. Desde que el almirante Kimura se le ocurrió la idea de probar sus fuegos artificiales en una de nuestras bases ubicadas en un atolón tropicalmente acondicionado para el cultivo de caña y la reparación de las naves militares, aquello fue tomado como un duro despertar; sumado al hecho que las cuentas de las reparaciones debían tener muchos ceros y no precisamente a la izquierda.

—¿Qué hay para la cena?

—No sabía que ibas a llegar tan temprano, así que corres con suerte. Tu abuelo hará la cena, pero no ha soltado prenda sobre lo que cocinará; en otros asuntos, la gata, esa que estas cuidando está embarazada ¡de nuevo! Deberías averiguar cuál de los gatos callejeros le hizo la gracia.

—Pensé que la vecina del piso treinta la mandó a esterilizar, al menos eso había creído.

—Si de mi dependiera, ya tuviera un hogar. Este lado de Brooklyn no es seguro para una madre soltera como ella. Quizás Roxana puede solucionar ese asunto.

—Tampoco es para tanto, abuela. Es una gata.

Parte 2

Finalizada la cena, me quedé hablando con mi abuelo. Mientras que mi abuela iba a alimentar a los gatos.

—¿No saldrás a hacer trabajo de campo? —me preguntó mi abuelo.

—No, debo ir lentamente con esto de retomar mi viejo empleo. Además, tengo que lo más decente posible a la cena en casa del señor Joaquín.

—Tu hermano me confirmó una noticia. Al tal José Frontera le cayó la recluta. Me huele a que es un asunto publicitario, con razón no habían escrito más de él; esto debo decirlo, tenías que regresar a tu negocio, naciste con ese don.

—¿Tú crees eso? Me refiero a lo de Frontera, no sé si sea material para ese mundo. Lo del regreso, pues me sale reunir dinero para una bicicleta; si es que quiero ahorrar en esto de movilizarme de un lado a otro.

—Vamos a ver si hay algo de Benny Goodman en algún rincón de la señal satelital. En otros asuntos ¿te conté aquella vez que le hice sangrar la nariz al famoso Rey de la fumigación? —negué con la cabeza. —, eso fue en el dieciocho, el palurdo me había contratado para un asunto con su departamento de ventas.

La lista de anécdotas de mi abuelo parecía no tener fin y aquella era una que contaba con un cierto deje de amargura y al mismo tiempo de heroísmo; ya que, para ese entonces Efraín ya tenía tiempo con un cinturón marrón en karate do, así como un temperamento fuerte. Una de esas mezclas que tiene su equivalente a tener un fósforo encendido cerca de un contenedor de gasolina. Todo eso, debajo de su tranquila sonrisa.

—El tipo ese me dijo una serie de incoherencias relacionadas con mi desempeño y le pedí que me viera en la calle. A los segundos, yo ya estaba con la postura llamada “la postura de la espada y escudo”; el bobo me lanzó un intento de golpe y mi respuesta llegó con dos. El segundo fue un zuki de derecha que aterrizó en su cara.

—Y ¿no tuviste problemas con ese asunto? Digo, ya que creo que, en ese entonces, las leyes laborales eran diferentes a las que tenemos ahora; además hay algo de fondo en todo aquello.

—Pues, yo estaba rodeado de mujeres y sabes bien que no soy del tipo que se propasa, pero allí conocí a alguien que me puso en contacto con tu abuela. Además, sabes bien que no soporto que estén diciendo cosas que no son y mucho menos sobre mí. Se salvó de un tercer y un cuarto ataque, gracias a eso pude montar la ferretería.

—Así como probar tu particular estilo de karate ¿no?

—También.  

Parte 3.

El día había llegado, era un primer acercamiento al sospechoso, se hacía en un terreno en donde no parecía ser muy querido; noté la tensión desde el momento en que Roxana entró con él a la sala. —Al, te presento a Nick. Creo que hay mucho que celebrar hoy.

—Y ¿puedo saber cuáles son los motivos para la celebración? — pregunté, aquello fue convertido en una disputa entre dos leones para saber de los dos rugía más duro.

—Pues, para dentro de quince días mi banda de jazz estará más cerca de codearse con las mejores. —respondió Al, en tono desafiante y buscando la aprobación de Roxana.

Desde su esquina, el señor Joaquín ni corto ni perezoso respondió. —Yo pensé que íbamos a celebrar la victoria de la corona inglesa en el Mar de la Tranquilidad.

—Lo mejor será que no metamos el acontecer actual; además ¿acaso se necesita un motivo para hacer una cena con las personas importantes que tenemos? — con ese comentario Roxana trató de cortar en seco la confrontación, yo me encontraba en el medio y me debía comportar como un gato de larga cola en un cuarto lleno de mecedoras.

—Dime Nick ¿a qué te dedicas? —me preguntó Al, tratando de ignorar lo que había hecho.

—Soy vendedor en un pequeño local familiar, una ferretería. Y ¿te gusta el jazz?

—Al punto que me considero el que será su próximo monarca. Antes estaba muy metido en el rock pesado y me di cuenta de que era un caballo de carreras muerto, había dejado de ser autentico desde hacía tiempo. Y ¿Cómo te va con eso?

—¿Las ventas? Hasta hoy, pues regulares. Trae comida a la mesa y es lo importante y aparte del mundo musical ¿a qué te dedicas estos días?

—Soy profesor de música, aunque tengo otras fuentes de ingresos; deberías venir un día al bar donde mi banda y yo acostumbramos a tocar, el local se llama Hipocampo.

—Pensé que había cerrado durante los días de la prohibición. —respondí, esperaba pacientemente cual iba a ser su reacción.

—No, quizás no plenamente; te voy a dar una tarjeta para que no se pongan payasos los de seguridad si decides pasar antes. Es bueno saber que aún hay gente trabajadora en este país y que el orgullo obrero y del pequeño comerciante no se han marchado, lástima que nadie comprende esos conceptos. —terminada la cena, Al me invitó a un local a jugar billar.

Parte 4

—En esa casa no se puede hablar de temas serios ¿no lo crees, Nick? Lamento decir que volviste a perder. No pasa nada, yo creo que no todos deben ser buenos en algo y yo ya encontré tu punto flaco; al menos no apostamos nada de valor.

—Pues sí, pero te aseguro que, si nos medimos en un honorable juego damas chinas, el resultado será otro. Y con temas serios ¿a qué te refieres?

—Los sucesos actuales. Tengo la opinión que cuando un líder le devuelve algo a la sociedad, hay un sector de esta que lo tildará de miles de cosas; incluso, va a escalar la disputa a niveles descontrolados. —sonaba convencido de sus propias palabras. Yo me mantuve callado, trataba de sacarle unas cuantas palabras más.

“¿Tendré las agallas para hacer la pregunta?” Esa duda creció cada minuto y me repetía el mantra que lo estaba conociendo y todo el asunto de soltar las bombas me iba a poner al descubierto. Pero considerando la velocidad con la que hablaba, solo era cuestión de tiempo para que él mismo sacase el tema a flote.

—No es la primera cena tensa que me ha tocado sobrevivir. Claro, no te voy a negar el hecho que me encanta esas breves peleas con el padre de Roxana, aunque tengo la doctrina personal de no rebajarme al nivel de esas personas que no pueden ocultar su falta de cultura ¿sabes?

—¿Te ha funcionado? —no le iba a soltar que su nivel intelectual era el que estaba en tela de juicio y más cuando se le buscaba pelea a un policía y no a uno cualquiera que estaba en el extremo opuesto de los comentarios venenosos; había sido muy afortunado de no haber terminado como colador.

—Voy a fumar, Nick ¿Qué te puedo decir? No por nada estoy por hacer historia y ¿Qué le quedará a él? Una pensión de retiro con pocos ceros a su favor y creo que estoy siendo demasiado amable con lo que le pasará.

—¿Qué hay de Roxana?

—Veo que te gustan las preguntas con trampa, pillo ¡eso me agrada! Pues, se habrá sacado algo parecido a un premio mayor en la lotería. Siempre y cuando comprenda una que otra cosa sobre mí; aunque eso es tema para otro momento y lugar.

Y siguió hablando, con alguna que otra interrupción de mi parte. Solo me faltaba por saber si era capaz de cumplir con todo aquello que estaba saliendo de su boca. Eso sí, se había aprendido muy bien el discurso que sus amigos pardos le enseñaron; le salía natural y mezclado con alguna cosa de su propia cosecha.  

Pero ¿en qué momento se había mezclado con esa gente?

Y ¿Cuál es el título de este mar de letras? El cajón de varios temas.

Mientras espero que mi nueva supervisora se desocupe para ponerla al corriente de lo que he hecho, me dio por escribir unas quinientas palabras, debo comentar que apelaré por usar diferentes temas a los que he querido hincarle el diente, pero la verdad es que no creo que sean suficientemente extensos como para darles el tratamiento de las quinientas palabras, así que creo que lo mejor que puedo hacer es darles salida a estos pequeños temas.

 Le he estado dando vueltas al tema relacionado con la relevancia que tiene cierto blog capitalino, ya que parece que ni hasta su propia (y autonombrada) némesis tiene algo más de cinco años que no se actualiza, claro es bueno saber que una persona que deja en entredicho sus dotes para escribir y comentar con respecto a la insuperable; siempre hacía de las suyas cuando se anunciaba una nueva entrega de la ya mencionada y creo que lo mejor del asunto es que se mantenga así.  

Regreso a mi ciudad, las preguntas que me hago en relación con el mundillo siguen ahí; la comunidad de YU GI OH me parece que siempre estará muy cerca de esa que se dice defensora del anime y del manga; dicen que se la primera mencionada se estuvo reuniendo en un sitio, pero hay otros que dicen que regresaron al mismo lugar en donde se estuvieron reuniendo desde que comenzaron sus andanzas y creo que de alguna manera, siempre la van a llamar para los mencionados eventos de anime. Aunque ¿vieron de cerca todo el asunto con los grupos? La verdad, quien sabe.

Así como no dejo de preguntarme ¿Qué fue de esa gente que estuvieron defendiendo al magno evento friki nacional? En concreto, todos esos que en el año dos mil ocho decidieron salir de la enorme asociación en una particular carta ¿todo lo expuesto allí era verdad o era una puesta en escena para el resto de la gente? Todo indicaba que buena parte de estos se unieron a las personas que se fueron del país y creo que si un día algunos de ellos se cruzan allí en donde están, capaz apelan por el clásico “si te he visto, no me acuerdo”.

A pesar de la piratería, el mono peleador y otras series han regresado a la pantalla pequeña criolla; de hecho, estuve viendo una serie por un canal regional, pero supongo que no generó la audiencia necesaria para mantenerla en el aire. Pero no solo son las series animadas de Japón, muchas series animadas de producción estadounidense también se han unido a la programación. Digo, por mucho que se rompan las vestiduras uno diciendo que la gente que disfruta el anime en la cuna de libertadores lo hacen por los caminos verdes yo creo que el problema con la caja boba y su programación es otro. No necesariamente relacionado si compraron la licencia de emisión de alguna serie o lo hacen por otros medios.

¿Cómo habrá sido estar dentro del cuarto grupo que apareció en Maracay? Ese que se presentó haciendo ruido sobre las personas que lo estuvieron apoyando, que golpeó la mesa alegando que con ellos se iba a lograr algo importante; yo sé que hay muchos más cuentos sobre el mismo, pero dudo mucho que uno de algunos que estuvo allí quisiera prestarse para una conversación sobre ese tema.

Conceptos sobre la mesa y otros asuntos.

Mientras escribo las presentes líneas, el avance de las estadísticas de visitas en mi blog lentamente se van acercando a la meta. Quizás no al ritmo que quiero, unido al hecho que regresaron las visitas de un solo dígito; pero quiero creer que en algún momento del año dos mil veinticuatro todo vaya a llegar a buen puerto. Unido al hecho que no he estado escribiendo en algunas secciones de este rincón del internet, ya que creo que debería hacerlo de un momento a otro, a pesar del hecho que algunas de las nuevas secciones no han generado las visitas que me gustaría.  Aunque creo que debería escribir unos cuantos relatos para ver si el asunto puede cambiar de matiz.

Debería buscar una forma de dar a conocer las grotescas piezas de origami que comencé a hacer, a ver si así puede aumentar el volumen de visitas. Pero creo que ya intenté el tema de la fotografía en mi blog y creo que si bien una sección que pudo dar para más, considero el hecho que lo mejor sea dedicarle pensamientos a otra cosa; lo cierto es que me abrí una red social relacionada con la fotografía y creo que debería buscar la manera de conectar ambos lugares para ver si así se puede dar un cambio para mejor.

Parece que todo el asunto relacionado con el lema relacionado con la supuesta mejora en la cuna de libertadores le quieren dar unas cuantas vueltas más, por mucho que traten de mezclar esas ganas con el más reciente tema del circo electoral. Pero hay una serie de asuntos por debajo de la mesa que dicen mucho más de lo que parece, al menos personalmente creo que si bien el asunto de la mentada recuperación ya no debería ser un tema, aunque creo que dejo la presente pregunta ¿Cuál puede ser el próximo tema?

Hablar de reclamar el famoso territorio en reclamación en estos días, por mucho que se use el tema del nacionalismo o de la “recuperación” de un precinto penitenciario, lo cierto es que hay que el régimen de forma completa, tienen que mantener a la gente opinando y saltando de un sitio a otro. Pero la verdad es que no van a querer enmendar la economía nacional, mucho menos los famosos servicios públicos; van a dedicarle dinero para que las oficinas de asuntos ridículos de las gobernaciones y alcaldías hagan una que otra cosa con la búsqueda de los votos.

Cierro el presente mar de letras, pensando en el tema friki y como siempre es habitual. Llegué a pensar que iba a ver a ciertos personajes en el curso de origami, pero lo bueno es que no fue así; parece que, si es algo en el que el anime tiene un papel predominante, allí los van a tener, tratando de usar su camuflaje entre los de la nueva generación. Me quedan alrededor de veinte palabras para ir cerrando en quinientas el presente mar de letras, dudo mucho que de algún momento a otro todo el asunto de las secuelas del regreso del insuperable vaya a explotar.

Esa (falsa) conversación.

Transcribo la presente conversación entre tres personajes, dos capitalinos y uno del centro de la nación, considerados como eminencias del mundillo, autoridades dentro del mismo; esta conversación se llevó en una cafetería (como era de esperar) en territorio neutral para las partes.

Guerrero urbano.

Con la salida de los grupos, yo llegué a pensar que las cosas iban a mejorar. Pero todo se redujo a lo que había cuando comenzó el asunto, a los confines de las ciudades donde habitaba el mundillo; pero debo decir que me tomó por sorpresa el hecho que hasta la peor festividad de la capital ya no me consideró como persona no grata cuando cambiaron de administración.

Delta Volador.

Yo lo escribí en mi blog y no me cansaba de repetirlo a quien me pedía mi opinión del asunto. La solución era sencilla, buscar un líder, no importaba si estaba escondido fuera de la capital. Con un líder, el mundillo estaría en una mejor condición en este momento, pero eso lo sabían los profetas del caos. Lo peor del asunto, es que me tildaron de uno y de hasta cosas peores cuando decidí cerrar mi blog.

El observador.

Si todos se hubieran dedicado a apoyar mi proyecto, otro gallo estaría cantando ahora. Pero como les gustaba criticarlo con fervor así como compararlo con otros mejor establecidos allá en la capital. Simplemente no podía pisar su ciudad, porque ustedes mismos me sumaban a un lote de altaneros con quienes, en muchas ocasiones, ni sabía quiénes eran.

Guerrero urbano.

Las críticas eran necesarias y las comparaciones eran inevitables, viejo amigo.  Si hubieras sido inteligente y saber tomarlas, pues tu proyecto no estaría tan olvidado como lo está ahora; pero déjame recordarte que en los últimos años de tu proyecto, lo abandonaste y te fuiste con la competencia ¿Qué tienes que decir al respecto?

El observador.

Que fui el primero en que sentó las bases del mundillo. La influencia de mi proyecto llegó a la capital, les guste o no admitirlo.  Toda la idea de grupos trabajando por la afición es derivada de mi proyecto, una gran comunidad virtual en donde intercambiar ideas, comentarios, opiniones quien implementó todo eso fui yo.

Delta volador.

Pero parecía que allá dentro quien tenía la última palabra de todo eras tú, observador. Si los grupos, especialmente en la capital, te eran adversos era por el hecho que ya estaban medianamente al tanto de cómo estaban las cosas por allá. Mira que cerrar temas en tu propio portal web y mandar censores por los blogs de diferentes personas,  eso decía mucho de tu postura. Aunque lo mismo se puede decir del Guerrero Urbano, quien mandaba a sus acólitos a las reuniones de los grupos.

Guerrero urbano.

¡Yo no soy mercenario de nadie! Yo solamente quería información de primera mano, tu vieja agrupación también tenía cola que le pisaban, esas leyendas urbanas alrededor de la misma y su comportamiento que tuvieron en muchas ocasiones. Además, si a la gente le gustaba mi contenido, sin importar que tu vieja agrupación estuviera o no en el ojo del huracán.

El Observador.

Y por esa misma razón, esas rencillas tan grandes es que yo nunca me animé plenamente en llegar a la capital. Tú, Delta Volador, estabas hablando de un líder, el mundillo me tuvo como líder y lo que hicieron ustedes dos fue lamentable. De haber sabido que solo asistían a mi evento por mera cortesía y no como compromiso con el mundillo, no los hubiera dejado entrar. Y tu Guerrero urbano, tu línea editorial siempre fue a favor de un lado así como si había pases de prensa para ti y tus acólitos, la opinión del festival era positiva.

Delta Volador.

Recuerda una cosa, Observador ¿Quién asistió y te llenó esa fiesta que hiciste en el occidente del país y la vendió como la que iba a destronar a la fiesta friki más grande de la nación? Fue mi vieja agrupación y, sin que me quede nada por dentro, eso fue un gran error de parte del grupo. Ya que, nunca regresó de esa visita. Y amigo Guerrero urbano, tus acólitos e incluso tú mismo se ganaron esa mala fama, no solo con las reseñas a petición, los pases de prensa entregados a discreción y esa autoridad que tenías para pontificar sobre lo que  pasaba en el mundillo. Quizás por eso, muchos te apoyaron mucho cuando te prohibieron la entrada a la peor fiesta capitalina, pero cuando llegó el reemplazo del alud y te hicieron lo mismo, simplemente la gente no te escuchó.

Los presentes decidieron calmarse un poco.

Guerrero urbano.

¿Alguna vez pensaron que el mundillo seguiría adelante?

Delta Volador

Yo creo que sigue estando en una situación precaria, sin importar quien o quienes estuvieran pidiendo que se le unan a su propuesta. Pero yo mantengo un punto, considero que algunas de nuestras ideas estaban por caducar en algún punto cuando nos arriesgáramos en sacarlas a flote.

El Observador.

Quizás, solo quizás si en el momento nuestros proyectos hubieran trabajado juntos desde un comienzo, la historia sería diferente. Aunque creo que ya es tarde para eso.

Siguen las negociaciones absurdas.

Al momento en que escribo estas líneas, las negociaciones entre unos políticos venezolanos siguen dando de qué hablar, parece más una gira de ineptos alrededor del mundo; la cual comenzó en Noruega y la última vez que leí o escuché sobre el tema estaban en la isla del caribe llamada Barbados. Pero, parece que entre las sanciones más recientes y los comentarios de algunos cuantos, así como el hecho que las cosas han mejorado, parece que algunos de los que se van a esas mesas de negociaciones ya comprendieron. Esas cosas simplemente no sirven para nada.

Las cosas en la cuna de libertadores parece que consiguen una forma de empeorar, algo que si bien no terminan de sorprender ya el presidente encargado parece que ya anda comenzando a ver un poco la luz al final del túnel; esta gente no saldrá de forma pacífica, por mucho que la misma gente que lo apoya parece que andan pensando lo contrario. Quizás no hay mucho que decir sobre el tema, ya que parece que llueve sobre mojado; aunque creo que no, ya que si bien las sanciones parecen estar subiendo de intensidad y que hay un tablero en el cual alguien quiere que el presidente encargado tenga que ponerse serio y concretar el asunto de la salida.

Quizás las sanciones también les sirven a los defensores nacionales e internacionales para argumentar sus defensas, pero lo cierto es que el mal rato de la economía venezolana estaba presente mucho antes de la llegada de las sanciones; cuando comenzaron las expropiaciones así como las estatizaciones de empresas y hasta de la banca.  Creo que es un asunto que esas empresas ya no le sirven al pueblo, sino que se han convertido primeramente en la caja chica de muchos de los personajes del gobierno venezolano, así como en una sombra de lo que una vez fueron.

El ajuste editorial

Si, ha pasado tiempo desde hace tiempo que comenzó la nueva etapa editorial de esta cosa y llegó ese singular momento en que me tocaba hacer un ajuste a la misma etapa. Aunque parece que los artículos de mil palabras ya parecen distantes, aunque creo que no se han desaparecido plenamente, aunque sigo escribiendo aquí y aunque he descuidado esto de comentarles a los otros cronistas de blog que tengo en recomendados, pero en algún momento voy a retomar ese singular hábito.

Al momento en que escribo estas líneas, primeramente tengo rato sin escribir mis relatos y darlos a conocer por aquí, aunque siendo una cosa que debería también retomar y así como el hecho que debo escribir sobre los temas que mantengo aquí. De hecho, creo que me tocará buscar una forma de permear este ajuste editorial a todo el blog.

Y si soy honesto, este ajuste se me va a quedar grande ya que muchas de las secciones que aún tiene esta cosa van a seguir con el mismo estatus que tienen en el momento en que estas líneas están siendo escritas; pero creo que es mejor dar un comienzo honesto que no dar uno de forma plena. También quiero comentar que haré lo mejor que pueda para seguir aquí, escribiendo, ya que parece que los otros que metí en este asunto han desaparecido del mapa y que me ha estado costando sacar temas con los cuales armar uno de mis intentos de artículos.

Creo que estas líneas deberían ser publicadas en otra sección de este rincón, pero como este rincón lo administro yo, pues creo que las publicaré donde mejor me parezca hacerlo; pero también considero el hecho que hay todavía mucho por comentar así como también hay muchas cosas en las que me toca dedicarle una que otra crítica.

See Your Space Cowboy

El mes de mayo y otros engendros.

El mes de mayo, el quinto mes del año, me dejo un mal sabor de boca. No es para menos, ya que las cosas en el empleo donde me encuentra a la fecha mientras escribo estas líneas no van tan bien; unos dicen que son cosas normales en la empresa pero que deben dejar de ser normales, mi jefa directa dice que me necesita en mi puesto ya que tiene muchas asignaciones que soltar y que soy el indicado para manejarlas.

Pero mi compañera parece estar celosa y creo que deseando que me vaya de la oficina,  yo también lo quiero pero en ocasiones (que no son pocas) considero que necesito el empleo, a pesar de todos los dolores de espalda y cabeza que me genera. El contrato no establece fecha de culminación, aunque hoy parecen demasiado distantes las felicitaciones que me dieron cuando me tocó suplir a esa persona.

La situación del país tampoco es la mejor que se diga, se agotan las mentadas cartas sobre la mesa y quiero creer que cierto perro blanco está comprendiendo que los forajidos no van a salir con votaciones algunas, mientras sigan aferrados a ciertas oficinas públicas, van a tener que salir como llegaron. Una verdadera lástima que sea ahora que lo comprendiendo, ya que, como es muy sabido que cada día que pasan esos forajidos en el poder, se hace más difícil la vida de los venezolanos.

He estado caminando más y creo que me sale hacer unos pequeños ajustes en el blog, quizás por la misma situación en la que estoy o por el hecho que muchas reseñas que debería estar haciendo, no las hago con la misma velocidad que me gustaría y yo que quería hacer más especiales de comics en esta cosa; pero vamos a ver cómo me va con este ajuste. Ya que quiero usar ese ajuste para abordar temas con una nueva óptica.

 

Sobre el sexto mes del año.

El sexto mes del año se fue, inicia el conteo regresivo para diciembre y las cosas lejos de mejorar, solo están peor. Eso sí, el desastre nacional sigue con su rumbo a quien sabe dónde puede llegar. Por mucho que unos digan que aún este asunto sigue en caída libre, yo creo que posiblemente el fondo está un poco más cerca; por otro lado, el plan de sacar un poco más de dinero con esto de tomar horas extras y sábados en mi nuevo empleo resultaron en algo raro ya que el dinero que eso me trajeron no era el que esperaba.

Y hablando del empleo en que ando, yo he estado pensando de forma recurrente que posiblemente en algún momento me vayan a decir hasta aquí Fermín, ya que las novatadas que he cometido son bastante densas. Aunque no puedo mentalizarme en negativo, ya que hacerlo es llamarlo y de verdad, que el asunto este de trabajar por mi cuenta está peor que antes y de verdad que algunos de los beneficios que me ofrece la mencionada organización, no son tan malos en comparación con otros lados.

Quiero creer que no solo me voy a quedar en ese sitio, a pesar de todo, sino también que esa esperada reunión con las compañeras de mi antiguo empleo nos podamos ver; ya que parece que, a pesar de lo toxico que era ese departamento, las cosas van medianamente bien. También aprovecho en comentar que espero que a partir del próximo mes que estará por llegar, el proyecto que tengo en mente para el blog comience, así como mi singular plan de sacarme otra tarjeta de crédito y pagar la que tengo; ya que el en cuestión de días, el límite que se mostraba como amplio, quedó consumido en un fin de semana; luego hay unos que dicen que en la cuna de libertadores no hay inflación.

 

See Your Space Cowboy

Sobre las reseñas de libros y otros seres.

Sigo pensando que tengo muy atrasado el tema de las reseñas de los libros, así como el hecho que tengo rato sin escribir por estos rumbos. He estado pensando que no solo debo reseñar los libros que leo para el reto que (en ocasiones) tomo para la mejor red social que conozco, GoodReads. Pero también pensé que, dado el hecho que los libros andan muy costosos pues decidí hacer el reciclaje de reseñas de libros.

Sí, llegó ese momento en que las reseñas recicladas van a llegar a la sección de los libros y creo que era un asunto del tipo inevitable, además que buena parte de los libros que tengo merecen una segunda lectura; posiblemente, en su momento se me escaparon una que otra cosa en su momento o fueron libros que tuve que abandonar por alguna razón.

Pero esta oportunidad, la cual me motivó a quitarle un poco la mugre que había en este rincón de mi blog debo aprovecharla para sacar más temas; tengo tiempo sin publicar una de mis mal llamadas obras en esta cosa, más que todo por el hecho que si bien aún tiene episodios, los nuevos aún no han llegado y ando pensando que parapeto me invento para enmendar el asunto, eso sumado al hecho que no sé cómo darle un final a dicha historia, en vista que se me complicó el asunto con las tramas secundarias, esas que en ocasiones son mejores que la principal.

A pesar que mi nuevo empleo me ha complicado la rutina de leer y de escribir, me agrada, pero esos dos hábitos tengo que buscar la forma de retomarlos, incluso puso en jaque el progreso que tengo con la aplicación del búho verde para aprender idiomas, una aplicación que recomiendo ampliamente, así sea para agitar las aguas con esto de aprender y conocer otro idioma. Sé que con alrededor de trescientas o más palabras no se anima nuevamente un apartado, pero siento que es algo y creo que es tiempo de comentar una que otra cosa por esta parte del blog.

Finalmente, doscientas diez mil visitas.

Bien, revisando las estadísticas de visitas de esta cosa me atrevo a decir una cosa y es que ¡Llegamos a la meta! Sí, me toma por sorpresa todo el asunto considerando el hecho que no estaba actualizando a la velocidad que quería, el especial va lento y puedo contar con los dedos de las manos y los pies la cantidad de artículos nuevos que he hecho hasta la fecha. Pero creo que no es momento para eso, ya que hay que celebrar un poco a pesar que (muy posiblemente) mi situación personal/laboral vaya a ser diferente al momento en que estoy escribiendo esto.

Honestamente, pensé que esta cosa llegaría a las doscientas diez mil en algún momento de la mitad del año, pero en vista que marzo se ha comportado bien conmigo y quiero creer que algo bueno vendrá conjuntamente con este pequeño logro. De hecho, un rincón del internet que tiene el mismo tiempo que esta cosa y que habla de muchos temas, pareciera que pudiera llegar más lejos, pero en vista que no escribo precisamente cosas bonitas del gobierno venezolano, de la industria de la animación japonesa y que mis especiales de reseñas apenas me han generado visitas, aquí sigo y con los otros responsables que han variado un poco el asunto.

¿Quieren que les comente algo personal? Pues, a pesar que al momento en que escribo estas líneas, posiblemente mi situación laboral va a ser la de regresar a ver qué hago con mi título universitario; hay dos compañeras que me agradan mucho, en especial al ojo y a pesar que tengo la costumbre de romper nexos con los compañeros de labores, esta ocasión si todo sale mal, voy a romper con esa costumbre. Alejándome del asunto personal, voy a intentar alearme un poco del tema político en el aparto de general, ya que poco tengo que decir sobre la situación de la cuna de libertadores, ya que es un tema que cansa bastante pero es uno que tengo que mantener activo.

Adicionalmente, para ir cerrando este mar de letras tengo que comentar que a pesar de mis ausencias aquí y las de los nuevos responsables de esta cosa, personalmente voy a seguir escribiendo aquí, quizás sea tiempo de considerar un cambio más serio en el blog y concretamente con el contenido. A partir de ahora, la meta será llegar a las doscientas veinte mil visitas, así de simple.

 

See Your Space Cowboy