—¿Alguna novedad, Artemis? —preguntó la capitán de la nave—, creo que nos bebimos lo que quedaba de café.
—Ninguna, capitán. Por lo del café, pues no se angustie; estoy segura que hay más; de lo contrario, pues a colar de nuevo con el usado. Si me permite el comentario, es muy calmado el viaje y considerando la zona…
La artillera no llegó a completar la frase, la alerta de ataque comenzó a sonar.
—¡Todo el personal a sus posiciones! Artemis ¿puedes darme un reporte de daño?
—Si capitán. Los escudos bajaron en un quince por ciento y sigue el descenso. Los atacantes son monoplazas, pero aún no veo un patrón de formación—replicó Artemis.
—¡Que forma de despertar! Creo que detectar el patrón de formación no lo tienen o lo están escondiendo. —dijo Oliver.
—Me parece que lo están escondiendo, ya que me da la impresión que son naves no tripuladas. —replicó Roldán.
—¡Sean lo que sean, los quiero fuera de mi radar! Artillera, tienes mi permiso para activar el arsenal de esta chatarra ¡hazlo de inmediato! —gritó Vicky.
Un certero disparo sacó de combate a dos monoplazas, pero aún quedaban cinco molestando. —Capitán, patrón detectado. Vuelan en formación espiral y luego cambian haciendo un zigzag para reagruparse. —matizó el navegante.
—Y ¿Qué rayos quiere decir eso?
—¡Que es conveniente mantenernos en movimiento! —exclamó Oliver—, Artemis, trata de derribar al que parece el líder del equipo, vamos a avanzar.
—¡Hagan lo que indicó el timonel de la nave! —exclamó la capitán. “Menos mal que se quedó mi nieto, de lo contrario, la situación actual sería lamentable. Dudo mucho que el piloto automático pudiera asimilarlo.”
—Cayó el líder del equipo, capitán. El resto se retira ¿los derribo o procedemos a perseguirlos?
—Mejor no. Dame un reporte de daños y considero que lo mejor es seguir con nuestro rumbo, no sabemos si la nave nodriza puede estar cerca y mejor armada. —replicó Oliver.
—Creo que el asunto es serio. No es normal que nos arrojen drones solo para hacernos pasar un mal rato. —finalizó la capitán de la nave
Luego de unos minutos de silencio, la capitán retomo sus labores con las siguientes palabras.
—¿Puedes tratar de localizar la nave nodriza de donde salieron esos drones? —preguntó Vicky.
—¡Seguro, capitán! Para eso vamos a tener que cambiar el rumbo.
—Entonces, traza una ruta secundaria. Lo importante es llegar con vida al punto de reunión. —puntualizó la capitán.
—Lo mejor será mantenernos todos despiertos, no vaya a ser que nos caiga otra sorpresa. —la observación de Oliver era buena, aunque a Vicky eso le pareció mal.
—Timonel, necesito hablar contigo en privado. Mariana ¿puedes tomar el timón unos minutos?
—Pero capitán, no tengo conocimiento de cómo usar el timón.
—Mantenlo recto hasta que termine de hablar con Oliver. No será mucho tiempo.
Lejos del puente de mando de la nave, abuela y nieto comenzaron a hablar.
—¿Qué rayos intentas hacer?
—Ayudarte a dirigir la nave y a la tripulación.
—Reconozco que lo estas haciendo bien y que tienes conocimiento que yo. Pero no me hagas ver mal con la tripulación, te recuerdo que la máxima autoridad aquí ¡Soy yo!
—¿Solo por el hecho de que está a tu nombre? ¡Con razón los de tu gremio no dudan en cortarse la garganta los unos a los otros! Tanta informalidad no es buena y no necesitas de mi ayuda para hacerte quedar mal con la tripulación.
—Sea el gremio que sea, una nave no puede tener dos capitanes. Una de estas más y te dejo en el primer planetoide abandonados con el que nos topemos ¿Queda claro?
La capitán regresó al puente, para su sorpresa fue recibida por las siguientes palabras. —Hay una petición de comunicación y es en video—dijo Artemis.
—¿Alguna idea de quien puede ser el misterioso que se quiere comunicar? Lo sabremos cuando acepte el asunto. Ponlo en pantalla.
—¡Vicki! Que alegría. —resultó ser Foster, pero sonaba diferente y de paso hablaba en galáctico.
—Puedo decir lo mismo, Foster ¿A qué debo este placer?
—Me alegra ver que ya tienes una tripulación. Estoy en las cercanías con algunos familiares en una de las tantas bases de nuestra propiedad, así que ¿Qué me dices de cerrar los cabos sueltos? Ya que, mientras antes comiencen, será mejor.
—No me parece mal, honestamente. Y ¿Qué hay con el primer pago? Si nos vamos a meter en líos, mis muchachos y yo vamos a necesitar dinero, cena, así como unas cuantas horas de descanso.
La base de Foster resultó ser tal como la tripulación se la imaginaba.
—Ni toda la prensa de chismes puede juntar tantas bocas abiertas—dijo Vicky—, aunque se les nota que tienen rato sin salir. Soy capitán de una nave no me hagan quedar mal muchachos.
—¿Le decimos que hablamos galáctico o que no tenemos primer oficial? Es un asunto bastante serio y creo que la honestidad es una buena política para todos los presentes. —preguntó Roldán.
—Yo llegué a pensar que lo teníamos. —agregó la doctora del equipo. —, considerando que nuestro sargento está con nosotros.
—No soy yo quien debería decirlo, pero tenemos compañía—apuntó Artemis—; y ¿Dónde está el sargento? Capaz se está poniendo elegante y de verdad…no lo culpo.
—Vicky y su tripulación; una bastante joven por lo que veo. No le presten atención a esta comitiva, aunque si me siguen los voy a poner al día; me da la sensación que les hace falta un integrante. Hay mucho de lo que hay que hablar y comer, claro está.
Oliver se integró rápidamente, a pesar de la mirada fulminante de su abuela. El comedor, a diferencia del hangar no mostraba tanta opulencia, pero debían caminar con cautela, la comitiva de los Foster era famosa por ser algo más que personal de protocolo.
“Mira que hacer una entrada de última hora, Oliver; te pareces a tu abuelo.” Pensó la capitán, no estaba del todo contenta con aquella acción, a pesar de lo que habían hablado minutos atrás.
—Seguramente el relato de como esta tripulación fue reunida es uno muy interesante. Lo cierto es que el tiempo apremia, los he contratado para que recuperen una persona, una quien es muy importante para mí.
—¿Una hermana? —preguntó Vicky.
—No, lo lamento y me agrada que solo sea el capitán quien inicie la conversación. Hablo de mi prometida, pero es más por lo que nuestra unión les traerá a ambas familias. Los molestos piratas se la llevaron, pero mi personal no deja de mencionar el nombre del terrible…Uriel Salgari.